¿CURSO DE PNL INTENSIVO O REGULAR?
Cuando decidimos estudiar PNL o Coaching nos encontramos con un mercado lleno de ofertas y muchísimas opciones. Uno no solo tiene que decidir dónde estudiar PNL, sino también en qué modalidad tomará dicho curso.
Tanto en un curso de PNL como en un curso de Coaching los factores a tener en cuenta son:
En un Curso Intensivo de PNL, se producen cambios personales, y el conocimiento es más inconsciente. es decir, uno se encuentra consiguiendo nuevas metas aunque tal vez ni sabe cómo lo está haciendo. Los cambios fluyen. Respecto al conocimiento, éste se incorpora tan rápido, que nuestra mente consciente no puede estructurarlo tan efectivamente. De modo que si le preguntamos a un alumno que terminó un curso intensivo por los contenidos vistos, puede que no los recuerde bien, o que los mezcle.
En el Curso regular de PNL, por el contrario, el conocimiento se incorpora de a poco, y lo hago consciente. Los cambios personales aparecen si me los propongo, y me alejo un poco de mi rutina diaria para reflexionar al respecto. Las personas que asisten a un curso regular de pnl o coaching, normalmente asisten a sus trabajos diariamente o llevan su vida de familia como todos los días. Esto hace que estén sumergidos en sus problemas y alegrías de todos los días, y por ende, no prestan atención a los nuevos conocimientos y capacidades. El cambio surge cuando la persona se los plantea como una meta, o cuando el docente de PNL hacé hincapié en tomar el compromiso de cambiar aquello que queremos.
¿QUÉ TIPO DE CURSO DE PNL TOMAR?
Cursos Intensivos de PNL, más cambios personales que adquisición de conocimientos.
Cursos Regulares de PNL, más conocimientos y capacidades que cambios personales
Por supuesto que esto varía de persona en persona, del docente, y del instituto de PNL o Coaching donde concurra. Esto lo escribo en función de mi experiencia como director de IAFI, con el fin de que le sea útil cuando tenga que decidir. No hay un mejor que otro. Simplemente depende de lo que la persona esté buscando.
A muchas personas les cuesta tomar este tipo de decisión. Puede que otras lo tengan claro. Me gusta escribir sobre esto, porque tanto sea para nuestros cursos o para los de otras instituciones, haber elegido una modalidad de cursada incorrecta puede llevar al abandono.
LA AGENDA PERSONAL
De más está decir que si te vas a anotar en un curso regular, de por ejemplo, un año de duración, deberás ser constante. Algunas personas mantienen la misma agenda durante todo un año, de manera que saben qué tiene que hacer los lunes, qué deben hacer los miércoles y qué días tienen libres, por ejemplo.
Por lo tanto, cuando te anotas en un curso de PNL regular, es necesario que comprendas que ese día de la semana deberá estar disponible durante todo un año para el curso.
EMOCIONES DURANTE LA CURSADA
Otro factor a tener en cuenta, es tu estabilidad emocional. Si sos de esas personas que durante un mes se sientes de una forma, y el otro mes se sienten completamente diferentes, entonces debes considerar seriamente el hecho de anotarte en un curso regular. Muchas personas somos de esa forma, los cambios emocionales son lógicos, e incluso muchas veces buenos. Pero tener en cuenta hasta que punto tus cambios de estado de ánimo pueden hacer que abandones tu curso de PNL.
CONSTANCIA DURANTE EL CURSO
Muchas veces cuando empezamos algo nuevo nos sentimos motivados por el nuevo descubrimiento. Pero con el correr del tiempo, muchas personas se desmotivan. Es como cuando a un chico le compran un juguete nuevo, lo usa 2 días seguidos, y luego lo deja abandonado porque otra cosa retiene su interés. Sucede que muchos adultos mantenemos conductas que usábamos cuando éramos chicos. Si eres de las personas que se desmotivan fácilmente, trata de evitar cursos de PNL largos.
DIFERENCIAS ENTRE CURSO DE PNL REGULAR E INTENSIVO
En el mundo de la PNL, un curso regular te permite una asimilación lenta pero profunda de los conceptos. El cerebro asimila una y otra vez durante todo un año conceptos que suelen estar presentes en cada clase. En este caso, el conocimiento se fija por repetición, por llamarlo de una manera.
Un curso intensivo, que debería durar tres semanas, todos los días y todo el día, te sumerge plenamente en la temática. Es como tener frío y tirarse a la pileta en vez de bajar por la escalera. En estos casos, las personas permanecen 18 días hablando, pensando y viviendo con la PNL. Los cambios que genera el curso en las personas son más rápidos y conlleva a una sobrecarga emocional muy agradable. En este caso, los conocimientos se fijan por su intensidad emocional, y no tanto por repetición, como es en el caso de un curso regular.
El intensivo también es muy cómodo para personas que tiene problemas de distancia o agenda completa durante el año. Muy recomendable para ansiosos también.
Algunos institutos, como el nuestro, tienen una modalidad que se llama semi intensiva. Ésta es un punto intermedio entre las otras dos.El docente a cargo del curso debe contemplar el tipo de modalidad. Por un lado porque convoca a diferentes perfiles de personas, y por otro lado debe evitar el aburrimiento, disponer de diferentes formas de transmitir conocimientos y sentimientos.
Despertar emociones, respetar horarios, y ser flexible improvisando formas de mantener a los asistentes atentos, son algunas de las habilidades que tienen que estar en juego.Es importante advertir que un curso intensivo de PNL, debe tener cierta duración mínima. Las normas internacionales lo establecen en 18 días de duración, entendiéndose que es un tiempo mínimo indispensable para que decante la experiencia y se transforme en conocimiento.
Nuestro instituto, además de contemplar la modalidad regular e intensiva en PNL, ofrece modalidades intermedias, como cursos cuatrimestrales y semestrales, (consulta antes porque varía cada año).