APRENDER HIPNOSIS
Aprender hipnosis puede resulta algo místico o solo para ciertas personas con poderes, piensan los más desconfiados. Sin embargo, la práctica de la hipnosis es algo que hacemos sin darnos cuenta durante el día.
EL PROCESO DE APRENDER HIPNOSIS
Cuando enseñamos los principios de la práctica en nuestros cursos de hipnosis nos gusta usar una simple metáfora: cuando uno estudia guitarra empieza de a poco, estudia las notas, luego las escalas, los arpegios, y luego con los acordes imita canciones simples y populares, hasta adquirir habilidad.
Además, si bien todas las personas pueden hacer música, hay quienes tienen mayor capacidad natural. Para avanzar es necesario reconocer donde uno está parado. Entonces, si uno admira a Eric Clapton, un rey de la guitarra, y está comenzando a tocar.
De igual modo, al aprender hipnosis, Milton Erickson es, lo que Clapton a la guitarra. Uno no va a pretender estudiar a Milton Erickson y obtener su pasmosa habilidad el instrumento, o incluso lo toca hace años, tal vez tome de modelo a Clapton, y lo imite por tutorial Youtube o en algún libro, pero seguro no pretenderá tocar como Clapton. Al menos al principio.
Por supuesto, y por suerte, siempre hay personas que igualarán, e incluso superarán al modelo inicial. Pero esto lleva mucho tiempo y esfuerzo, una dosis grande de aprendizaje y quién sabe, si el destino mismo.
EL MODELO MILTON
Sin embargo, sí se puede aprender hipnosis, pese a las limitaciones. Tomar de modelo a Erickson para estudiar la mente y el comportamiento humano, es inspirador y guía para todos los interesados en aprender hipnosis, su estudio, investigación, práctica y desarrollo.
Y hablando de aprender hipnosis, una de las pautas más importantes que deja Erickson en su legado es la progresión del aprendizaje, mucho más allá de la fabulosa arqueología de la estructura de su tipo de lenguaje, que tan exhaustivamente investigaron los fundadores de la PNL, Bandler y Grinder.
Una lenta y exasperante progresión en el aprendizaje y los cambios. Erickson pone mucho énfasis en gestar pequeños cambios que producirán un “efecto bola de nieve”, y en facilitar el aprendizaje paso a paso, con los recursos propios de cada persona.
Puede que algunos cambios parezcan espectaculares, pero en general son el resultado de una progresión en el tiempo.
Aprender hipnosis es estudiar y hacer hipnosis y generar trance. Es necesario ir poco a poco. Estudiar el lenguaje vago ericksoniano e incorporarlo poco a poco, y aprender de los métodos tradicionales más probadamente efectivos y por sobretodo practicar y practicar.
Tomar lo mejor, lo más realizable por cada uno, en la etapa propia, y ponerlo en práctica, con confianza, equivocándose y aprendiendo. En resumidas cuentas, para aprender hipnosis, es necesario aprender a aprender. O, tal vez, aprender hipnosis, es el camino para aprender a aprender. Eso es lo que hacemos en nuestros cursos de hipnosis.
Desde los antiguos egipcios y griegos, los chamanes de América y Asia, Franz Mesmer y su magnetismo animal, Faría, Braid, Liebault, Berheim, Erickson, Hilgard, Yapko, Rossi, Haley, Hartland y los grandes maestros de la Hipnosis, todos han ido abriendo camino e incorporando experiencia teórica y práctica.
Las posibilidades son infinitas y más allá, pero como le sucedió a Buzz Light Year en el maravilloso Toy Story, no se convirtió en un verdadero superhéroe hasta reconocer que era un simple muñeco.
La práctica de la hipnosis no es algo mecánico. Es, como también legaba Erickson, un trabajo en conjunto. El estudio y la repetición de modelos de lenguaje y técnicas es solo un medio para convocar a lo “nuevo”, lo que surge espontáneamente, en forma creativa, en acuerdo a la persona y al momento.
Al principio solo somos como un muñeco que juega un poco, luego, quizás, podamos volar.
Para IAFI, Guillermo Stilstein, Docente de Hipnosis Ericksoniana
